Hace tiempo que vengo hablando del estilo de dirección de Pep Guardiola. Creo que ha sido una referencia aplicable al mundo de los negocios, seas del equipo que seas.
Comunicación, trabajo en equipo, motivación,apoyo y recompensa, análisis, juego, juego y más juego, gestión del conflicto y misión, visión y valores de un proyecto. Incluso me parecía haber escuchado que la próxima temporada será su última etapa en el Barça, lo que le añade otra característica más, que sólo los buenos líderes conocen: la de la prescindibilidad.
Frente a él, otro estilo directivo muy diferente: el de Mouriño. Cada uno que valore cuáles son sus premisas como "coach", solamente me limitaré a reproducir un titular de una edición dominical de un periódico, nada más aterrizar en Madrid. Recuerdo la portada porque me chirriaba y decía: "Para ser un buen líder tienes que ser arrogante".
Muchos alumnos, fieles seguidores del Real Madrid le tomarían como ejemplo, y sin embargo la arrogancia estaría fuera de toda consonancia con las características de un liderazgo efectivo. Cómo debatiríamos eso si además hubiese ganado la Liga, la Copa del Rey y la Copa de Europa como lo hizo con el Inter de Milán?
Sin embargo Mouriño ha conseguido una gran victoria. Ha conseguido que Guardiola responda sin asertividad y de forma agresiva a todos los conflictos surgidos entre ellos.
Guardiola ha perdido los nervios y ha gestionado su conflicto con otro conflicto e insultos. Ha dejado de ser el líder inquebrantable y seguro para transformarse en humano y vulnerable.
Mouriño ha ganado esta batalla, como bien dice él, sin embargo hay una batalla que está más allá de los enfrentamientos personales: la batalla del buen fútbol, y creo que de esa batalla saben bien dos grandes equipos: el Barça y el Real Madrid.
Suerte a los dos en sus trayectorias y una reflexión para toda la plantilla del Barça: que vuestro juego y el espíritu de equipo continúe siempre con vosotros. Creo que en eso, algo tiene que ver Guardiola.
Por fin una entrada en la que puedo realmente sentirme bastante identificado.
ResponderEliminarSiempre me he decantado por la filosofía de Guardiola, al ser uno de los pocos deportistas quien, gracias a su pensamiento, logró acercarme un poco más al mundo del deporte e incluso hacerme ver en el Telediario la sección deportiva, sólo para ver qué decía o qué pensaba esta vez. Quería ver su manera de actuar ante tantos ataques ya que sabía que podría aprender mucho de ello, interiorizarlo, llevarlo a mi vida personal y, por qué no, tratar de "contagiarlo" a otras personas.
En principio este "tropiezo" podrían tacharlo de hipócrita -me remito a lo escuchado en mi círculo social habitual-; sin embargo, creo que éste es el verdadero carácter de un líder, aquél que, tan humano como todos, puede fallar y equivocarse y mostrar algo de su rechazo ante las palabras tan absurdas y arrogantes -en mi opinión- de Mourinho, nunca con un ánimo productivo sino más bien, destructivo y polémico.
Bajo mi punto de vista, hablamos de dos vías completamente distintas que llegan al mismo lugar: ser dos grandes entrenadores. La gran diferencia es el uso de la ética, el respeto y la solidaridad (las grandes carencias del entrenador portugués) que es lo que identifican a tan sólo uno de los dos como un verdadero líder.
Espero sinceramente que aprendamos más de esta magnifica persona, de su manera de comportarse y propio autocontrol, de su espléndida ética y gran compañerismo. Y, por supuesto, comenzando por mí mismo, que gran falta me hace. Aplicado a las finanzas, ética laboral y económica, esta sociedad funcionaría con mejores engranajes. Una sociedad en la que nos basemos en el lema "el fin no justifica los medios", que no haya corrupción por propio beneficio ni mucho menos tales aires de competitividad con medios destructivos; si no con ánimos de superación personal que nos hagan ver que podemos evolucionar gracias a la evolución de los demás que nos inspiran y motivan, y no debido a la eliminación de la competencia molesta sin mejorar mi propia competitividad.
Un gran vídeo sin duda, ya que a pesar de la polémica a la que nos impulsa pensar a priori, podemos llegar a una gran reflexión tras darle unas cuantas vueltas que quizá y afortunadamente, haga cuestionarnos nuestro carácter y métodos de liderazgo.
Guillermo Huertas Guillén 1ºBHCB
Interesante comentario Guillermo!
ResponderEliminarLa verdad es que Guardiola demuestra el lado humano al equivocarse en el estilo de comunicación que utiliza. Sin embargo parece que es un gran coach que tiene claro hacia donde se dirige y cuál es el camino que ha decicido tomar, especialmente en un mundo tan competitivo como el fútbol y tan basado en resultados. Ojalá que muchos directivos aplicasen su estilo, filosofía y capacidad de comunicación a sus empresas (aunque se equivocasen una sola vez).
Saludos.