viernes, 3 de febrero de 2012

Prevención aplicada a uno mismo

En tiempos de crisis se incrementan las situaciones de tensión y estrés. El miedo actúa como un factor de bloqueo y las bajas laborales por ansiedad o trastornos psicológicos comienzan a  ser el principal problema tanto para trabajadores, como para empresarios y también para las entidades aseguradoras.

Hemos hablado muchas veces de la comunicación interna adecuada, pero qué deficitarias siguen nuestras empresas y administraciones al respecto, incluyendo a medios de comunicación y tertulianos diversos!

Ante todo este caos externo, de características violentas, siempre queda la búsqueda interna. Ayer escuché una frase optimista que me hizo sentir muy bien -fue dicha por un político en la televisión, lo que incrementó mi asombro-, y me pareció inteligente, porque se refería la cambio continuo:

"La felicidad no es una estación de destino sino una manera de viajar"

Meditación en un minuto con resultados espectaculares en las organizaciones donde se practican, incluídos hospitales. ¿Por qué no probarlo?



2 comentarios:

  1. Violencia en el entorno laboral

    Los compañeros de trabajo son igual que la familia: Los ves todos los días, convives con ellos pero no siempre te apetece verlos. Es por ello por lo que siempre pueden surgir conflictos, rencillas, o cualquier otro tipo de evento que impide que la relación se lleve con entendimiento, asertividad y buen criterio.
    Las causas de violencia en el entorno laboral pueden ser muchas: Desde disputas competitivas, a cuestiones sexistas y racistas pasando por el desentendimiento. Es muy importante conocer y analizar el rol que asume cada uno dentro del grupo de trabajo. Todos ejercemos uno y es importante estar al tanto. Podemos encontrarnos con gente que se pasa de lista, gente realmente inteligente pero poco participativa e incluso gente que solo se limita a seguir las ordenes del resto. Es aquí donde pueden surgir los conflictos. La disputa por conseguir que tu propuesta sea la aceptada puede ser objetivo de competencia, al igual que una falta de asertividad puede causar ser el objetivo de todas las miradas. Lo que está claro es que si no eres el jefe y se trabaja entre iguales hay que saber valorar las ideas de todos y cada uno de los compañeros. Aunque una idea prevalezca sobre la otra, hay que saber escuchar, entender y objetar de manera crítica los aspectos de las propuestas y no descartándolas porque las haya dicho una u otra persona. Puede que la verdadera solución se encuentre en el conjunto de todas o en la idea que ha aportado la persona que menos te esperas.

    Un aspecto que también ha estado siempre presente, aunque cada vez se da menos es el de la violencia sexista. Las mujeres siempre han sido objetivo de burla, acoso y vejaciones por parte de muchos compañeros e incluso de sus propios superiores. Esto produce un desgaste mental de la persona pudiendo llegar a sufrir depresiones y el abandono del puesto de trabajo. Las mujeres son, en muchos aspectos, superiores a cualquier hombre y aún sin ser así es una persona con el mismo valor que cualquier otra. Desprestigiar a una mujer de ese modo es como desprestigiar a cualquiera de nosotros. Con un poco de sentido común estos problemas se solventarán y harán del entorno laboral un espacio agradable y lleno de efectividad y grandes ideas.

    Pero ¿Qué pasa con ese jefe que solo sabe mandar y obligar a sus empleados de forma autoritaria a hacer las tareas? Que creará un mal ambiente de trabajo y por lo tanto menos efectivo. La mejor forma de aumentar la fidelidad y productividad de los empleados es haciendo sentirles importantes y parte de un todo. Si por el contrario un jefe se limita a mandar y no tener comunicación con el empleado hará que este se agobie, se encuentre mal y no exprima todo su potencial por la causa. La escucha activa, la asertividad y la horizontalidad en la jerarquía del equipo aumentan la confianza de todos y por tanto, la efectividad, compromiso y participación de todos los implicados en la causa.
    Javier Moreno Gómez

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  2. Muchas gracias Moreno....
    Ojalá que la comunicación positiva triunfe en estos tiempos de crisis y miedos.

    Seguro que lo aplicarás en tus futuros trabajos de rodaje...
    Saludos

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